Segarra Joyeros

En el año 1939, Miguel Segarra Espinosa y su primo Miguel Espinosa López inauguraron el primer local en la calle del Trench Nº 26. Este modesto establecimiento inicialmente se dedicaba a la platería y bisutería, centrándose principalmente en arreglos y composturas que eran esenciales para el negocio en aquel momento. Con el tiempo, el abuelo Miguel Segarra Espinosa continuó la empresa en solitario, acompañado por su hijo Miguel Segarra Fabuel, llevando la nueva travesía comercial hacia la venta y fabricación propia de joyas en oro.

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Miguel y su esposa Juana asumieron la dirección del negocio, y hasta hace unos años, fueron los impulsores de la tradición. Actualmente, sus hijos, Miguel y Fernando, lideran la empresa, llevando consigo el legado familiar. En el año 2020, se llevó a cabo una reforma interior, con la visión de brindar un ambiente más contemporáneo y acorde a los tiempos actuales. La renovación buscaba una imagen moderna e informal, pero sin perder la tradición y sobriedad que caracterizan a Segarra Joyeros.

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A lo largo de los años, Segarra Joyeros ha mantenido las buenas costumbres, ofreciendo joyería accesible para todos los públicos. Además, se ha destacado por la incorporación de encargos personalizados y trabajos especiales, marcando así la diferencia en el servicio y la atención al cliente.